martes, 29 de julio de 2014

Pedro Páramo

Una ventana hacia el inframundo, la obra cumbre de Juan Rulfo: Pedro Páramo.

He decidido volver a los principios básicos de la literatura latinoamericana, dejar para después las nuevas publicaciones extranjeras... retornar a los clásicos.

Después de leer y releer Rayuela le ha tocado el turno a Pedro Paramo, la lectura clásica de las Secundarias y Prepas de nuestro país.

Es una novela cortita (se puede leer en un mismo día) pero con una densidad enorme, que no la hace sencilla (esta vez la tuve que leer dos veces seguidas, para interiorizarla mejor).

Admiro la voluntad de nuestras autoridades educativas, para promover su lectura entre los jóvenes, pero lamento la incapacidad de nuestro sistema educativo para lograr que los chicos lleguen a apreciar esta obra. Es una obra maestra si se le entiende, pero si no se capta su sentido, podría hacer aborrecible la literatura. El error radica, creo yo, en que los maestros dejan a los jóvenes solos con su lectura, sin acompañarlos (tal vez porque ni ellos mismos la entienden) esta debe ser una novela de lectura comentada en grupo, para poder saborearla... una lectura en solitario podría ser indigesta para un joven.

¡Pero es maravillosa!: Juan Preciado llega al pueblo de Comala  buscando a su padre: Pedro Páramo, sin embargo, se da cuenta de que ha muerto ya, además llega a un pueblo fantasmal, rodeado de una espesa bruma a pesar de estar presente el sol. Las atmósferas sombrías que nos presenta Juan Rulfo son imposibles, considerando, además, las poquísimas palabras que utiliza en su narrativa. Un genio de verdad.

Conforme  avanza la historia, los ambientes, así como los cambios de tiempo y espacio, hacen darnos cuenta de que todos los habitantes con los que se va relacionando Juan Preciado, ya están muertos, incluso te llegas a dar cuenta de que Juan mismo ya ha muerto, y en el colmo de los imposibles, llega un punto en el que te preguntas a ti mismo si, ya que puedes escuchar las conversaciones del mundo de los muertos, ¿no habrás muerto también tú? Es una sugestiva experiencia personal del inframundo.

Para mí, esta obra inaugura el "Realismo mágico" que tanto se explotaría en el mal llamado "boom latinoamericano". Rulfo describe con una fineza increíble lugares inexistentes y los crea de la nada con su propia palabra y de la nada los destruye en la noche con la estrella junto a la luna.

Unas perlas de este libro:

"Cada suspiro es como un sorbo de vida del que uno se deshace".

"Si yo escuchaba solamente el silencio, era porque aún no estaba acostumbrado al silencio; tal vez porque mi cabeza venía llena de ruidos y de voces".

"Hacía tantos años que no alzaba la cara, que me olvidé del cielo".

Si ya leíste esta novela, no sé que estás esperando para volverla a disfrutar y si no la has leído eres de los afortunados que podrán viajar a Comala por primera vez y conversar con las voces del pasado: Abundio, doña Eduviges, Fulgor Sedano, Damiana Cisneros, Susana San Juan y quien sabe... hasta contigo mismo.

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